Hedy Lamarr
En el verano de 1942 Hedy Kiesler Markey y George Antheil registraron con el nombre Secret Communications system la primera patente de transmisión de información mediante microondas con espectro ensanchado, en la oficina de patentes norteamericana que le asignó el número 2292387. Hedy, nacida en Austria en 1913, había sido una precoz pianista y estudiante de ingeniería, carrera que abandonó para comenzar la de actriz a las órdenes de Max Reinhardt, conocido director de cine alemán de la época.
Con veinte años se casó con Friedrich Mandl, traficante de armas austriaco al que acompañó a las reuniones con los clientes, que incluían los ejércitos de Hitler y Mussolini, en las que tuvo ocasión de aprender mucho sobre tecnología militar. En 1937 Hedy, de ascendencia judía, huyó de su país natal y de su marido en pleno ascenso nazi, refugiándose en Estados Unidos, donde empezó a trabajar en la industria cinematográfica tras conocer a Louis B. Mayer. Este magnate de los todopoderosos estudios de Hollywood le puso el nombre de Hedy Lamarr, en honor de Barbara LaMarr, otra actriz de los estudios que había fallecido trágicamente poco antes . Al comenzar la guerra Hedy, que odiaba extraordinariamente a los nazis y sobre todo a su exmarido, que la había tenido poco menos que secuestrada, desarrolló y patentó la idea de dirigir los torpedos por una onda de frecuencia variable para evitar ser detectada, y se la ofreció al ejército aliado. Pero la electrónica necesaria no estaba disponible entonces, y el proyecto fue abandonado. Años después, la empresa Sylvana Electronics desarrolló la idea que hoy día es la base de sistemas de telefonía sin cable tipo BlueTooth, la comunicación por satélite GPS y las redes locales de ordenador sin cable, WLAN.
© Adela Muñoz Páez, 2009